Escuche su programa ¡En el dolor esta Dios! en Radio Luz, 97.7 fm (http://www.radioluzfm.com/) día Jueves 10 pm.

Escríbame a: eneldolorestadios@yahoo.com

La evangelización es nuestro deber cristiano, llevar el Evangelio al que no lo conoce y a aquellas personas que asisten poco a la iglesia, trabajemos en ello, le digo como hacerlo, escríbame.

Si tiene interés en algún tema especial, o que lo escuche en la radio, o publicados aquí, y le parece importante para poder llevarlo a su comunidad o grupo de oración. Entonces no esperemos, comuniquémonos.


domingo, 18 de mayo de 2014

Programa de Radio Luz el 15 de Mayo 2014

Radio Luz
Jueves 15 de Mato de 2014.
Contenido del  programa: En que consiste el programa y para quien está dirigido.

Contenido: Bendito, alabado y glorificado sea Ntro.  Señor Jesús, por este día y esta hora en la cual permite que por primera vez se transmita este programa en Radio Luz.
El programa ¡En el dolor esta Dios! Está dirigido para:

En primer lugar, para todas aquellas personas que tenemos necesidad de la palabra de Dios, El habla con nosotros y nos da a conocer lo que quiere de nuestra parte, por medio de las escrituras, en ellas encontramos, dirección y fortaleza, es una forma por medio de la cual Él nos permite conocerlo, mas no comprenderlo, ya que así lo ha dejado escrito, esta referencia la encontramos en el Antiguo Testamento, libro de Exodo33.19. Que nos dice; Tendré misericordia de quien yo quiera, y tendré compasión también de quien yo quiera. Y lo encontramos en el Nuevo Testamento en el libro de San Juan 21.20-22. 20, Al volverse, Pedro vio que detrás venía el discípulo a quien Jesús quería mucho, el mismo que en la cena había estado a su lado y le había preguntado: «Señor, ¿quién es el que te va a traicionar?» 21 Cuando Pedro lo vio, preguntó a Jesús:
—Señor, y a éste, ¿qué le va a pasar? 22 Jesús le contestó: —Si quiero que él permanezca hasta que yo vuelva, ¿qué te importa a ti? Tú sígueme.
Con esto Jesús lo dice claramente, Él sabe cómo va actuar con nosotros, podemos conocerle pero no entender porque Él actúa de forma que es incompresible, por eso vemos que personas que para nuestro entender no son merecedoras de alguna bendición para El sí lo son, solo Él sabe porque.

En segundo lugar: Para las personas enfermas, debemos saber que la enfermedad no es un castigo, es una bendición ya que Nuestro Señor se vale de ello para realizar verdaderos milagros, no solo en la persona que padece la enfermedad sino, en la familia, realmente uno no sabe, es posible que a través de ello permita que el enfermos se ponga en Paz con Dios y así parta directamente a lo presencia de nuestro Señor o por su medio exista una conversión o acercamiento en la familia, muchas veces dividida por muchos motivos, pero siempre se realizan milagros alrededor de una enfermedad.

Tercer lugar: Va dirigido también para todos aquellos que tenemos problemas y por lo mismo existe una gran preocupación, aflicción y angustia.
Todos sin excepción vamos a vivir con algún problema, realmente no es fácil iniciar un dialogo sobre el dolor, es el problema más desconcertante y misterioso de la vida. Pero es útil y urgente manifestarlo, no hay que decir que esto a uno no le interesa, porque si todavía no has llorado muy pronto como todos deberás aceptar tu parte del dolor.
Tampoco tú vivirás sin lágrimas, las lágrimas son una herencia de todos, aun para los desheredados, el dolor se cruzara en tu camino sin que lo puedas evitar.
En el libro de Eclesiástico 2.1ss.
 Si te has decidido a servir al Señor, prepárate para la prueba. 2 Conserva recto tu corazón y sé decidido, no te pongas nervioso cuando vengan las dificultades. 3 Apégate al Señor, no te apartes de él; si actúas así, arribarás a buen puerto al final de tus días. 4 Acepta todo lo que te pase y sé paciente cuando te halles botado en el suelo. 5 Porque así como el oro se purifica en el fuego, así también los que agradan a Dios pasan por el crisol de la humillación. 6 Confía en él y te cuidará; sigue el camino recto y espera en él.
7 Ustedes que temen al Señor, esperen su misericordia, no se aparten de él, pues podrían caer. 8 Ustedes que temen al Señor, confíen en él: no perderán su recompensa. 9 Ustedes que temen al Señor, esperen recibir todo lo que vale la pena: esperen misericordia y alegría eternas. 10 Recuerden lo que les pasó a sus antepasados: ¿quién confió en el Señor y se arrepintió de haberlo hecho? ¿Quién perseveró en su temor y fue abandonado? ¿Quién lo llamó y no fue escuchado?
Es necesario aclarar que dificultades todos vivimos y que quien no tiene a dios para iluminar su camino, entonces sí que tiene el peligro grande de no poder tener el auxilio de Dios y su muerte puede ser sin retorno a la casa del Padre, en cambio al decidirse servir al Señor, seremos proados para aumentar nuestra fe y conocer la misericordia de nuestro Señor, por eso también es necesaria la interpretación de la lectura bíblica y en este caso se requiere para no tener el temor de quedarnos solo con lo que creemos que dice el versículo 1.

En cuarto lugar:
Es para los desalentados, todos aquellos que no vimos lo que creímos, porque sucedería como lo imaginamos y esto suele suceder por la falta de Fe, y de creer plenamente en Jesús.
El mejor ejemplo de esta situación la encontramos en el Libro de San Lucas 24.13ss. 13 Aquel mismo día dos discípulos se dirigían a un pueblecito llamado Emaús, que está a unos doce kilómetros de Jerusalén, 14 e iban conversando sobre todo lo que había ocurrido. 15 Mientras conversaban y discutían, Jesús en persona se les acercó y se puso a caminar con ellos, 16 pero algo impedía que sus ojos lo reconocieran.
17 Él les dijo: «¿De qué van discutiendo por el camino?» Se detuvieron, y parecían muy desanimados. 18 Uno de ellos, llamado Cleofás, le contestó: «¿Cómo? ¿Eres tú el único peregrino en Jerusalén que no está enterado de lo que ha pasado aquí estos días?» 19 «¿Qué pasó?», les preguntó. Le contestaron: «¡Todo el asunto de Jesús Nazareno!»
Era un profeta poderoso en obras y palabras, reconocido por Dios y por todo el pueblo. 20 Pero nuestros sumos sacerdotes y nuestros jefes renegaron de él, lo hicieron condenar a muerte y clavar en la cruz. 21 Nosotros pensábamos que él sería el que debía libertar a Israel. Sea lo que sea, ya van dos días desde que sucedieron estas cosas.
22 En realidad, algunas mujeres de nuestro grupo nos han inquietado, 23 pues fueron muy de mañana al sepulcro y, al no hallar su cuerpo, volvieron hablando de una aparición de ángeles que decían que estaba vivo. 24 Algunos de los nuestros fueron al sepulcro y hallaron todo tal como habían dicho las mujeres, pero a él no lo vieron.»
25 Entonces él les dijo: «¡Qué poco entienden ustedes y qué lentos son sus corazones para creer todo lo que anunciaron los profetas! 26 ¿No tenía que ser así y que el Mesías padeciera para entrar en su gloria?» 27 Y les interpretó lo que se decía de él en todas las Escrituras, comenzando por Moisés y siguiendo por los profetas.
Lo primero y los más grande que encontramos en este bello pasaje, es la certeza de que Dios nunca nos abandona, nuestro señor corre a buscarnos en nuestro desaliento y especialmente en nuestros problemas.
El versículo 16 nos demuestra que en toda situación difícil nuestra mente y nuestros ojos están ciegos ante la dificultad y no nos permite ver la solución, que es nuestro Señor y el camino que él nos muestra para solucionarlo.
El versículo 17, nos expresa que cuando andamos con problemas, se nos refleja en la cara y eso es lo que expresamos, eso no nos permite encontrar una solución, no es bueno ni es positivo para nuestro desarrollo.
En el versículo 21, demostramos que anteponemos nuestro criterio, y ese el motivo de nuestra desilusión, siempre se refleja la falta de Fe y de creerle en nuestro Señor, muchos creemos pero pocos le creemos. Hemos perdido la confianza cuando no vemos, resuelto nuestro problema o nuestra petición, acordémonos que  Dios lo ve diferente a nosotros y Él tiene su propio tiempo y su forma de arreglar las cosas nuestras.
En el versículo 22,23, y 24, nos demuestra que no escuchamos la voz de dios en nuestra vida, las personas dan sus testimonios de milagros y de la presencia de él, y aun así nosotros seguimos incrédulos.

Todo esto que hablamos nos orienta en nuestra vida, especialmente en las dificultades nos da esperanza y nos ayuda al crecimiento de nuestra Fe, la cual recuperamos y podemos reconciliarnos con Dios y con los que nos rodean.
Pues esta es la temática de este programa, que espero que sea de mucha bendición, orientación en su vida y especialmente cuando las enfermedades y/o dificultades se meten a nuestra casa sin pedir permiso, entonces necesitamos saber cómo tratarlas y como orientarnos.






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